A veces, con cierto sesgo e incluso prejuicio, se tiende a pensar que un perrito sin pedigrí y cumeja a decir basta no podría tener cabida en nuestra exclusiva socialité chilensis.
Sin embargo, la historia de "Pipa" sirve para desmitificar esta idea, por cuanto el coludo no sólo fue una de las figuras del inédito desfile en que modelos de elite lucieron pilchas de destacados diseñadores nacionales, sino que él mismo paseó por las pasarelas mostrándose tal cual es: Chico, peludo y chiguá.
Fueron semanas de preparación tanto para las maniquíes como dos cachupinas, "Andy" y "Nikita", que tomarían parte del exclusivo evento. Ataviadas de ropa súper chic, apenas un par de días antes del brillo realizado en el Museo de la Moda, se sumó "Pipa".
Zara Alaluf, miembro de Salvemos a las Mascotas Abandonadas (Salma), se topó con la quiltrita en Vicuña Mackenna y, temiendo que la atropellaran, la recogió.
PRÊT-À-PORTER
Como era monona, las señoras que hace algún tiempo conformaron el grupo, en su mayoría esposas de embajadores y diplomáticos, decidieron hacerla pasear con sus cuatro peludas patas sobre el escenario. De esta manera, cuando las exquisitas creaciones de Patricia Barrera, Wales y Chantal Bernsau eran admiradas por los asistentes, la mascota irrumpió: Asomada desde un bolso deportivo y enfundada en un coqueto vestido de mezclilla y vuelos, acompañó a Carol Goldschmidt, quien a su vez lucía un resplandeciente traje color oro de José Cardoch.
Los aplausos no se dejaron esperar, no obstante que su inclusión en el elenco pretendía algo mayor: Encontrarle dueño.
Si bien la agrupación presidida por Donna King no recoge canes, sino que apunta a educar a la gente sobre las esterilizaciones y adopciones, la "Pipa" les robó el corazón.
"Las mascotas merecen tener un techo, estar sanas y felices. Cuando vimos la situación en Chile, con tantos perros abandonados, nos conmovió", señaló.
Tras el desfile, destinado a reunir fondos con que seguir esta hermosa tarea, "Pipa" halló un hogar. ¡Y qué hogar!: Paz Musalem, hermana de la diseñadora Catalina Musalem Sarquis, decidió adoptarla.
- ¿Por qué una quiltrita?
- Siempre he tenido quiltros. Son más inteligentes y leales. Debería haber más consideración, porque los animales como éste son exquisitos.
Viviana Fainé B.
