“Nos encontramos en una situación crítica, hemos denunciado hasta el cansancio”, aseguró el director de Chiloé Silvestre sobre los hechos ocurridos el sábado.
“El sábado sufridos una tragedia, que nos marcará para siempre y que significa una gran pérdida”. Con esas palabras la ONG Chiloé Silvestre informó de la muerte de dos pudúes a causa de un perro que se coló en el centro de rescate de fauna nativa ubicado en Ancud, quitándoles la vida.
La noticia fue entregada por el propio director de la institución, Javier Cabello, quien informó que durante aquella madrugada, previo al inicio de las actividades del centro, “un perro invadió nuestras dependencias rompiendo varios recintos para ingresar y atacar a dos ejemplares de pudú (Pudu puda) residentes”.
Los dos ciervitos nativos en cuestión eran “Pudini” y “Pullü”, y “lamentablemente” ninguno de los dos sobrevivió al ataque, aseguró. También fue encontrado un coipo (Myocastor coypus) sin vida, con claros signos de una agresión canina.
“Personalmente, vi al perro cuando ingresé a Chiloé Silvestre y, posteriormente, junto a Carabineros vimos las huellas de perros en ambos recintos, además de los mordeduras que nos animalitos presentaban en el cuello”, detalló. El canino en cuestión hizo excavó para ingresar en los respectivos recintos en que se encontraba cada ciervo.
“Especulamos que tiene dueño”, planteó a La Cuarta la veterinaria de la ONG Rocío Vicencio; aunque aclaró que eso “está en proceso de investigación”. En cualquier caso, el can en cuestión “estaba en una súper buena condición corporal, no es asilvestrado ni sin dueño, está alimentado”, precisó.
El drama sin fin
“Pudini” era uno individua emblema de la institución, habiendo llegado en el 2017 con tan sólo un mes de vida, tras quedar huérfana por unos canes que atacaron a su madre; la pequeña no pudo volver a lo silvestre al quedar con “impronta” humana. “Crecimos junto a ella”, expresó Javier. “Era nuestro corazón, el espíritu de Chiloé Silvestre”; de hecho, “durante todos estos años hizo felices a muchos niños, adolescentes y adultos que vinieron a educarse con nosotros”. “Pullü”, en tanto, llegó también a muy corta edad.
“Nos encontramos en una situación crítica, hemos denunciado hasta el cansancio; y este terrible suceso, que ahora nos afecta directamente, nos lleva al límite”, manifestó. “No podemos permitir que esta desprotección e indolencia hacia la fauna silvestre se perpetúe en el tiempo”.
Javier cerró con un llamado a la “Alerta roja” para que “las muertes de ‘Pudini’ y Pullü no sean en vano”.
Durante la primavera, el propio centro ya había advertido el ataque de perros a pudús silvestres en la Isla Grande, algunos de ellos madres embarazadas con crías que perdieron la vida.
Hace unas semanas, en la Cámara de Diputados se discutió el proyecto de ley que buscaba declarar a los perros asilvestrados como especie exótica invasora para permitir su control por parte de la autoridad sanitaria; sin embargo, la iniciativa fue rechazada por una amplia mayoría.
Revisa acá el emotivo comunicado
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