El detective Mark Draycott, que investiga el caso, declaró sobre el testimonio de un amigo del principal sospechoso.
El caso de Madeleine McCann sigue siendo un misterio pese a los descubrimientos que se han hecho los últimos años. La niña de tres años que desapareció en 2007, en Praia da Luz, en Portugal, vuelve a ser noticia.
El detective Mark Draycott, involucrado en la búsqueda, se presentó el jueves 2 de mayo ante el Tribunal de Braunschweig, que investiga este caso, para entregar su testimonio al respecto.
Según el profesional, lo que cambió el rumbo de la búsqueda fue un mensaje de contestador de un examigo del presunto autor de este delito, Christian Brueckner, quien está en manos de la justicia.
“Ella no gritó”
A 17 años de la desaparición, el Tribunal de Braunschweig juzga a Brueckner por un caso previo. El primero de los policías en declarar fue el detective Mark Draycott, quien dijo que Helge Busching, un antiguo amigo de Brueckner que lo conoció en el Algarve (complejo vacacional donde desapareció Madeleine) durante los 2000, se comunicó con la policía británica en el 2017.
“En aquel entonces todavía teníamos un número de teléfono público que se publicitaba en todo el mundo. El público podía llamar para informar sobre la Operación Grange, la investigación para dar con Madeleine McCann. Uno de mis trabajos era comprobar los mensajes del contestador. El 18 de mayo revisé el contestador y había un mensaje”, dijo el detective.
Y añadió: “Dijo que tenía información y dejó un número de celular griego. Luego llamé a este número y hablé con un hombre que ahora sé que es Helge Lars Busching. Se refirió a sí mismo como ‘Lars’ y me dio información en relación con Madeleine”.
Bursching dijo que Brueckner le aclaró, sin más precisiones, que “ella no gritó”. El detective contó que hablaron durante dos días antes de que viajara para hacer su declaración.
“No hacemos jurar a los testigos”
“A medida que continuaba la línea de investigación, estuvo feliz de dar una declaración a la policía británica. Dijo que tuvo una conversación con Christian en el Festival de Orgiva en 2008. Esa conversación fue en relación con la Operación Grange”, continuó.
El juez le preguntó si le había tomado juramento y el detective respondió: “No hacemos jurar a los testigos. Nunca pagamos a los testigos por información. Es posible que podamos pagar algunos gastos (y lo hacemos). Pagamos 35 euros para que viajara en autobús a Atenas para recibirnos y le pagamos los gastos de regreso a donde vivía en Grecia. También le reservamos un hotel barato para que se quedara en la capital”.
Cabe destacar que Brueckner cumple una condena de siete años por violación a una anciana en 2019 y ahora está siendo acusado de una serie de ataques sexuales en Portugal entre el 2000 y 2017. Hasta el momento niega estar involucrado en la desaparición de Madeleine McCann.