Ethan Couch (21) quedará inscrito en la inclasificable historia carcelaria de Estados Unidos. Conocido como el joven affluenza (enfermedad de los niños ricos que no distinguen su responsabilidad por su estilo de vida), ayer quedó libre tras purgar una condena de dos años en una prisión por atropellar y matar a cuatro personas en 2013.
Couch, que por en aquel entonces tenía 16 años, fue absuelto por una jueza que admitió el informe de un psicólogo que determinó que sufría la ansiedad y la presión social que le provocaban las exigencias consumistas de su familia adinerada.
La condena que se le impuso fue de 10 años de libertad condicional, durante los cuales tenía prohibido conducir y tomar alcohol. Además, debía asistir a un centro de rehabilitación para superar sus problemas.
16 años tenía el ex presidiario cuando, mientras manejaba ebrio, atropelló y causó la muerte de cuatro personas.
Sin embargo, a pesar de la polémica que levantó esa sentencia y las burlas por la excusa del joven, Couch pareció no entender el mensaje ni superar la presión del dinero: a finales de 2015 se le vio en un video subido en las redes sociales en el que tomaba alcohol en una fiesta en México, donde había fugado. Tras esto, fue enviado a la cárcel por 720 días.
Arrepentido
Los abogados de Couch, Scott Brown y Reagan Wynn, aseguraron ayer que su cliente está arrepentido por lo que hizo. "Desde el principio, Ethan ha admitido su comportamiento, aceptado responsabilidad por sus acciones y ha sentido verdadero remordimiento por las terribles consecuencias de sus acciones", indicaron en un comunicado.
Pidieron privacidad para Couch y señalaron que deberá cumplir con seis años de libertad bajo supervisión bajo los términos acordados por la corte.
Couch deberá portar un monitor en su tobillo y no podrá estar en la calle luego de las 9 pm. También tendrá un parche que detecta si el portador ha consumido alcohol y puede ser sometido a pruebas aleatorias de drogas.
10 años de libertad vigilada recibió como condena el joven. No la respetó y lo enviaron 720 días a la cárcel.
El vehículo que maneje debe tener instalado un mecanismo con cámara que no permite encenderlo si el conductor ha estado bebiendo, señaló el medio.
Tonya Couch, su madre, está a la espera de ser juzgada por ayudar a su hijo a escaparse en 2015 y por lavado de dinero. Un juez le había advertido que utilizara su "sentido común" mientras estaba en libertad.
Pero la mujer de 50 años fue encarcelada nuevamente el miércoles pasado, tras haber violado los términos de su libertad condicional porque no pasó una prueba de orina, reportó el Star-Telegram.
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