Le sacaron dientes y recibió toques eléctricos en las orejas antes de ser asesinado. Así fue la horrible revancha del Cartel de Sinaloa. Atención: este artículo contiene imágenes fuertes.
Hace poco más de una década, Israel Rincón Martínes, alias "el Guacho", recibió una orden directa.
El mensaje era asesinar a Iván Archivaldo Guzmán, pero el sicario nunca pensó que se equivocaría de persona.
El Guacho, un sicario del Cartel de los Beltrán Leyva, tenía entre manos la tarea de asesinar nada menos que a uno de los hijos de Joaquín "el Chapo" Guzmán.
El capo mexicano había sido sindicado como responsable de causar la ruptura entre la organización de los Beltrán Leyva y el Cartel de Sinaloa, y había que cobrar la revancha.
Los Beltrán Leyva contaban con información que un testigo protegido había entregado a los agentes de la DEA.
En el mensaje se describe en detalle los lujosos vehículos en los que se movía Iván Archivaldo Guzmán, el hijo consentido del Chapo.
El problema fue que, en vez de matar al Rey de la Cocaína, sus hombres ejecutaron a Marcial Fernández, hijo de Manuel Fernández Valencia, El Animal o La Puerca, un sicario del Cartel de Sinaloa actualmente preso en EE.UU.
La venganza
Una vez conocido el crimen, el Chapo y sus hijos buscaron a los responsables y fue así como dieron con el Guacho.
Su captura, a manos del Cartel de Sinaloa, resultó más cruenta y escabrosa que compleja.
La tortura del sicario de los Beltrán Leyva se conoció durante el juicio en Estados Unidos que se siguió contra Guzmán Loera en 2018 y 2019.
De acuerdo con documentos sellados a los que tuvo acceso el periodista Alan Feuer, quien cubrió el caso para The New York Times, el Chapo contrató a un doctor para que despertara al Guacho cada vez que se desvanecía del dolor a causa de las torturas.
Entre las torturas que recibió el Guacho hubo toques eléctricos en las orejas y desprendimiento de piezas dentales.
Además de Guzmán Loera y sus hijos, Dámaso López Núñez, el Licenciado y uno de los cabecillas del cartel, estaban presentes.
Todo fue grabado en un video de casi 4 minutos que fue presentado por la fiscalía el 22 de enero de 2019.
Allí Rincón Martínez, el Guacho, aparece golpeado, con la ropa sucia y esposado.
"Mi compadre"
Es una especie de testimonio para salvarse.
En el video se escucha al Guacho relatar cómo quedó en medio de los dos bandos, pero que fue Arturo Beltrán Leyva, alias el Barbas o el Jefe de Jefes, quien lo llamó para una reunión.
La junta habría ocurrido tras el secuestro de uno de sus hermanos, Alfredo, El Mochomo, quien presuntamente fue coaccionado para desertar del Cartel de Sinaloa y sumarse a la familia Beltrán Leyva.
"Arturo [Beltrán Leyva] me preguntó que con quién estaba, yo le dije que del [lado] suyo y del señor [del Chapo], pero me dijo que no, 'aquí no va a estar con la prima [así se referían los Beltrán Leyva al Chapo], usted está con nosotros o con nadie, a la verga'", se escucha narrar a Rincón Martínez en el video.
Luego, en una reunión en Cuernavaca, en ese entonces bastión criminal de los Beltrán Leyva, el Barbas le pagó al Guacho para que contratara sicarios y matara a una lista completa del cartel rival.
El listado incluía al Chapo Guzmán, Iván Guzmán, Ismael el Mayo Zambada García y a Ignacio Nacho Coronel Villarreal.
Según el Licenciado, Rincón Martínez fue asesinado esa misma tarde tras grabar el video.
Cuando le preguntaron quién le había dicho que mataron al Guacho, López Núñez respondió: "Mi compadre", refiriéndose al Chapo.
Mira el video del Guacho
A continuación.
https://youtu.be/aeXU427u3YM