Con aplausos en gran parte del mundo científico y pánico entre los humanos más fundamentalistas, expertos europeos apretaron ayer el botón que dio vida al "Gran Colisionador de Hadrones" (LHC), la súper máquina que buscará recrear a escala humana el momento o "Big Bang" del nacimiento del universo.
La paranoia apocalíptica llegó a tal punto que en India una jovencita prefirió dejar esta vida para no sentir el guaracazo universal.
Chhaya T. (17) se tomó varias tabletas de insecticida. Sus padres la llevaron al hospital de Indore, pero los médicos no pudieron evitar el envenenamiento.
JOLGORIO
Pese a la desesperación de unos pocos, ayer la comunidad científica mundial vivió un día que quedará en los anales de la historia.
La marcha blanca del LHC salió tiqui-taca, pero la intentona se hizo con menos de un décimo de la velocidad de choque que puede alcanzar la máquina.
Para evitar sorpresas, los caperuzos del Consejo Europeo para la Investigación Nuclear (CERN) decideron echar a correr los rayos de protones en la dirección contraria. El túnel se portó impeque.
Se espera que el acelerador de partículas logre los primeros choques en octubre. En la velocidad "ultra", los sensores podrán registrar millones de pencazos por segundo.
Con el aparato funcionando a full, los físicos aseguran que podrán ver la materia igual a un décimo de segundo después de la creación del universo.
CHILITO
Los científicos chilenos vivieron la jarana de cerquita. El físico Marco Aurelio Díaz es colaborador del CERN en el proyecto Atlas, que buscará el llamado "Bosón de Higgs", una partícula desconocida, pero que tiene el pequeño gran detalle de dar masa a la materia.
"Sentí una emoción grande cuando los primeros protones circularon. Es el trabajo de años", señaló.
- ¿Qué se puede esperar del LHC?
- Mucho, desde el Higgs, la materia oscura o un mundo paralelo. Podremos responder con pruebas fehacientes si hay una quinta dimensión. Hay teorías que predicen 10 dimensiones y que afectarían la gravedad.
Marcelo Loewe, profe de la UC afirma que es puro chamullo que se forme un "hoyo negro" y la humanidad se borre cuando colisionen las partículas.
La construcción del LHC costó 4 mil millones de euros, tiene 27 kilómetros de longitud y está a 100 metros bajo tierra en la frontera de Suiza y Francia.
Claudio Sanz S.
