El ministro español del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, señaló que el comando de ETA descubierto esta semana y que ocupaba una casa en la localidad portuguesa de Obidos, tenía preparados 300 kilos de explosivos para realizar un atentado "inminente".
Pérez Rubalcaba aseguró que los 300 kilos estaban preparados para una próxima acción, pues, explicó, cuando se mezclan los componentes de los explosivos es para utilizarlos inmediatamente debido a que al cabo de poco tiempo pierden eficacia.
Por eso, se mostró convencido de que los etarras estaban pensando cometer un atentado "muy pronto", en una acción "inminente".
El ministro también se refirió a la detención ayer del presunto etarra identificado como Ibai Beobide Arza, en un control de la Guardia Civil entre las localidades de Asteasu y Villabona (norte de España), cuando circulaba en una bicicleta en posesión de documentación falsa y una pistola.
Beobide llevaba "las peores intenciones" y evidente que "no estaba haciendo deporte, porque nadie hace deporte con una pistola y un pendrive", aseguró el titular de Interior.