Con total sangre fría, miembros del grupo yihadista Estado Islámico (EI) confirmaron su responsabilidad en el atentado a un avión ruso, el que cual cayó en Sinaí (Egipto), dejando un saldo de 224 pasajeros fallecidos.
“Los soldados del Califato lograron abatir un avión ruso en la provincia del Sinaí que transportaba a más de 220 cruzados, y todos murieron”, sentenció el grupo extremista a través de un comunicado colgado en su cuenta de Twitter.
Además de confirmar su autoría tras el espantoso accidente, también señalan que actuaron en represalia por las “decenas de muertos (provocados) a diario por los bombardeos” de los aviones rusos en Siria.
Airbus
El avión derribado se trataba de un Airbus A321, pertenecía a la compañía rusa Metrojet y despegó este sábado a las 05:05 de la madrugada desde el aeropuerto egipcio de Sharm el Sheij hacia San Petersburgo, en Rusia, con 224 personas a bordo.
Sin embargo, el contacto con el avión se perdió 23 minutos después de su salida, cuando volaba a una altura de 30.000 pies (9.000 metros).
Los restos fueron finalmente encontrados en medio de una zona montañosa de la provincia del Sinaí del Norte y no se encontraron sobrevivientes.
Según expertos, en cuanto al método utilizado por los terroristas, la hipótesis de que el avión fuera alcanzado por un misil o un cohete es poco probable, debido a la altura en que se encontraba cuando se perdió el contacto.
Por su parte, Rusia expresó su escepticismo, y rechazó que el accidente haya sido causado por terroristas.
“Esta información no puede considerarse exacta”, comentó el ministro ruso de Transportes, Maxim Sokolov, en su cuenta de Twitter.