Autoridades defienden la medida argumentando que las personas que se toman fotos en una popular playa cerca del aeropuerto distraen a los pilotos.
Los turistas que se toman selfies en la playa de la isla de Phuket, en Tailandia, podrían enfrentar la pena de muerte por distraer a los pilotos. Así no más.
El tramo de arena se encuentra justo al lado del aeropuerto en el sur del país y se ha convertido en una atracción popular para los turistas, quienes se aglomeran para tomarse una foto con un avión pasando justo encima de su cabeza.
Y todo para presumir en sus redes sociales.
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Sin embargo, esta tendencia ha cansado a los administradores del aeropuerto. Incluso han planeado cerrar la playa, pues temen que puedan provocar un accidente.
Por ello, las autoridades decidieron llevar a cabo una drástica medida.
"La pena para cualquier persona que no cumpla con este reglamento incluye la pena de muerte, una cadena perpetua o una pena de prisión de entre cinco a 20 años, según la Ley de Aviación Aérea de 1978", confirmó el director general del Aeropuerto Internacional de Phuket, Wichit Kaewsaithiam.
"Estamos estableciendo una zona de seguridad que se categorizará como un área estrictamente prohibida, para impedir que las personas y los turistas tomen fotos", sentenció.
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