El primer ministro iraquí Haider al Abadi ordenó este jueves la ejecución inmediata de los yihadistas condenados a muerte. Aquello, en represalia por el asesinato por parte del grupo Estado Islámico (EI) de ocho hombres cuyos cuerpos fueron hallados el miércoles.
Abadi "ordena el castigo inmediato de los terroristas condenados a muerte y cuyas penas han llegado al grado decisivo" declaró en un comunicado, en alusión a que todas las apelaciones de los reos han sido agotadas y la pena capital ratificada por la presidencia de la República.
Serían unos 300
Ello implica la muerte de unas 300 personas, entre ellas mujeres y extranjeros, que fueron condenadas por formar parte del EI, según datos del poder judicial divulgados en abril.
Además hay otro tanto número de yihadistas condenados cadena perpetua.
La mayoría de esas personas son turcos u oriundos de exrepúblicas soviéticas.