Aunque han vivido siempre en Estados Unidos, los dos amigos gringos de siete décadas que atravesaron su país de costa a costa en unas scooter se conocieron recién la década pasada e, increíblemente, en Chile.
Tal cual, porque Bob Chase y Buddy Rosenbaum, que acapararon portadas de los medios gringos tras cumplir su propósito de viajar entre San Francisco, en el océano Pacífico, y Nueva York, en el Atlántico, llegó cada uno por su cuenta a este calcetín de tierra a mediados de los años '90 para recorer en moto hasta la Patagonia.
Cada uno montado en su poderosa BMW, partieron desde Santiago con destino a Tierra del Fuego.
Entre aceleradas y frenadas se encontraron un día cualquiera y rápidamente cacharon que tenían intereses comunes, como los motores y los viajes.
RUTA TRADICIONAL
Aunque en su país viven en extremos alejadísimos, gracias a internet comenzaron a ponerse de acuerdo para cumplir con un viejo anhelo de ambos.
Su idea era recorrer de costa a costa su país cada uno en su moto scooter, claro que en un modelo de tres ruedas.
"Cuando uno envejece puede mantener sus pasiones, no hay por qué renunciar a ellas, sino que hay que encontrar la forma creativa de expresarlas", explicó Buddy Rosenbaum, un médico jubilado de 71 años, para justificar la elección de los vehículos, que sin duda son más seguros que las motos de dos ruedas.
MUSEO
Además de satisfacer su deseo de viajes y aventuras, el recorrido de los gringos por su país tuvo como fin reivindicar la importancia de la denominada Ruta Lincoln, la primera que unió el este con el oeste de Estados Unidos.
"Es un museo de 5.500 kilómetros, que está desapareciendo y que es necesario preservar, ya que no hay suficiente gente que lo conozca y que esté interesada en mantenerlo con vida", explicó Bob Chase, de 72 pepas.
Pero al parecer el que más se cree el cuento es Buddy, ya que antes de iniciar cada nuevo periplo relee un clásico de la literatura yanqui: "En el camino", de Jack Kerouak, "porque me pone en el estado espiritual apropiado".