Una verdadera lluvia de meteoritos se podrá ver este lunes desde cualquier lugar del planeta. Son las Gemínidas, que se encuentran en la constelación Géminis y que iluminarán el cielo nocturno con hasta 120 estrellas fugaces por hora.
Las Gemínidas son enormes bolas de fuego, cuyo origen no está en la cola de un cometa, como otras estrellas fugaces, sino en un asteroide rocoso bautizado como "3200 Faetón", que esparce una gran cantidad de escombros polvorientos.
El mejor momento para observarlas, según los expertos, será a lo largo de esta jornada, aunque se podrán ver con menor intensidad hasta el 17 de diciembre.
Esta particular "lluvia de estrellas" tiene su origen en el choque de las pequeñas partículas luminosas, procedentes del paso de los cometas, con la atmósfera terrestre, que se produce cuando los restos del cometa se quedan flotando en el espacio y penetran en la atmósfera, momento en el que se aprecian estos fenómenos luminosos.
Los últimos estudios de las órbitas de las Gemínidas concluyen que fueron expulsadas del asteroide cuando se encontraba muy cerca del Sol. Según los astrónomos, su órbita lo lleva muy cerca de la órbita de Mercurio cada año y medio, por lo que el cuerpo rocoso recibe una ráfaga de radiación solar que podría provocar los cohorros de polvo que se evaporan y se integran en la Gemínidas.
"Featón 3200" fue descubierto en 1983 por el satélite astronómico infrarrojo (IRAS) de la NASA y es considerado uno de los primeros eslabones entre cometas y asteroides desvelados por los astrónomos.
Durante mucho tiempo los científicos pensaron que Featón era un asteroide aunque ahora ha sido clasificado como un cometa extinto. Según explica la NASA, básicamente es el esqueleto rocoso de un cometa que perdió el hielo después de varios encuentros demasiados cercanos con el sol.
(Agencias)