La actriz Glenn Close, recordada por su papel protagónico en la califa peli de suspenso "Atracción Fatal", tuvo que detener el musical "Sunset Bulevard", de la cual participa, en Broadway, choreada porque un perico del público la estaba distrayendo con su celular.
"Lo siento, paramos el show. Alguien está haciendo fotos", dijo enxuxada la rucia. "Deberías saber cómo molesta y distrae esto. Ahora podemos seguir con la actuación o hacer una sesión de fotos", ironizó dirigiéndose directamente al desubicado espectador.
Tras el incómodo parelé, la actriz seis veces nominada al Oscar, retomó su actuación. "De acuerdo, empezamos desde el principio de la canción", ordenó la estrella de 70 años.
GLENN CLOSE YA LO HABÍA HECHO
Esta no es la primera vez que la actriz se monta en el macho e interrumpe una obra por atados con el público. En 1994, durante la presentación del mismo musical, Close chantó en seco la función por culpa de los flashes de las cámaras del no tan respetable. "Podemos tener una conferencia de prensa o continuar con el espectáculo", dijo sarcásticamente ese día.
Otro actor que también sufrió por los celulíticos del público, fue el actor Kevin Spacey. En 2004, cuando estaba presentando un monólogo en el teatro Old Vic, varios móviles sonaron en la sala. El protagonista de "House of Cards", no aguantó y se fue al toque al camarín, sin terminar la función.