Lo que parecía algo imposible hace un par de meses, hoy se convirtió en realidad. Es que porfin se juntaron el presidente de EEUU, Donald Trump, y el líder norcoreano, Kim Jong-un. Dejando atrás las miles de amenazas que se mandaron en más de una ocasión.
Una reunión histórica que se da en Singapur, país neutral políticamente y altamente seguro para ambos mandatarios.
En el encuentro con la empresa Trump entró por la derecha y Kim por la izquierda. Ambos se estrecharon la mano y frente varias banderas de Estados Unidos y Corea del Norte.
Kim dijo a través de un intérprete que el camino para llegar a las conversaciones no fue fácil, mientras que Trump afirmó que "ambos líderes tendrán una fantástica relación".