El huracán “Sandy”, que en octubre causó graves daños en la región de Nueva York, parece tener otro efecto inesperado: un aumento notable de los nacimientos para el próximo verano, según informa el diario The New York Post.
Un centro ginecológico del condado de Westchester, zona residencial a las afueras de Nueva York gravemente afectada por “Sandy”, registró un incremento de la actividad de un 30%, con respecto al mismo período de tiempo en años anteriores.
“Nos preguntamos qué estaba pasando. Y lo entendimos cuando miramos los partos previstos para finales de julio y principios de agosto que es cuando nacerán los niños concebidos durante el huracán”, declaró la enfermera Linda Roberts.
Expertos como Jacques Moritz, director de Ginecología en el Hospital San Luke Roosevelt, aseguran que no es inusual que durante tormentas, nevadas y apagones se produzca un aumento de las concepciones ya que en esas circunstancias las personas están “más unidas” y “cercanas”.
Moritz recuerda que tras el atentado a las Torres Gemelas hubo un incremento de la natalidad por las concepciones que se produjeron en esos días mientras la ciudad de Nueva York estaba conmocionada.