Quizás por el cercano estreno de la séptima película de Star Wars -"El Despertar de la Fuerza", el 18 de diciembre a nivel mundial y un día antes en Chile-, al gringo Jacob Jeremy Mercer se le ocurrió asaltar un local de autoservicio disfrazado como Darth Vader.
El malandra de 32 años iba entero de negro como el malo más malo de La Guerra de las Galaxias, la gran creación de George Lucas, y se metió pistola en mano a un negocio de Jacksonville, Florida.
Pero un empleado reaccionó con valentía y lo golpeó en la cara con una botella. Cuando el ladrón se fue sin conseguir su objetivo, se sacó la máscara en el auto y lo cachó un testigo que lo sapeó a la policía, por lo que al poco rato lo detuvieron, herido en el rostro y sangrando por la nariz.
Y la gracia no le saldrá barata, pues fue condenado a dos años de cana por el delito de robo a mano armada.
