Hay asesinos que se disfrazan de payasos, de Freddy Krueger o del loco de la motosierra, pero ninguno como Laurence Honore (44), quien urdió un maquiavélico plan para matar a su marido disfrazada de la malula "Gatúbela".
El drama ocurrió en junio pasado, en la Ayuntamiento de Valenton, al noreste de París, luego de una denuncia puesta por Cristian Honore, quien perdió las elecciones para convertirse en el nuevo alcalde del pueblo en mayo de 2008.
Según el diario franchute L'Express y el británico Daily Telegraph, la mujer preparó un intrincado plan, que consistía en ponerse el traje de cuerina de la villana de Batman y dispararle en la cabeza una vez que llegara a su casa.
Hace un mes la acusada, que se desempeñaba como dueña de casa, llevó a cabo su alocada misión. Tras ponerse los guantes de látex y el pasamontañas con orejas, se escondió detrás de unos matorrales de su hogar y, acompañada de un rifle calibre 22, esperó a que su marido abriera la reja.
Pero tal como en el filme, el amor de la Gatúbela le jugó una mala pasada. Cuando lo tenía en la mira cambió de parecer y no apretó el gatillo.
El fallido candidato indicó que sintió una extraña presencia en los árboles. Con sorpresa notó que algo parecido a una rockera salía de las sombras y llamó a la policía.
Los abogados expresaron que éste era un caso de "frustradas ambiciones políticas y familiares" debido a la desilusión de Honore por convertirse en la primera dama del edil.
La investigación policial indica que Laurence quedó picada luego que su esposo perdiera una contienda electoral en mayo de 2008, cuando fue derrotado por el candidato de izquierda Françoise Baud.
Según la confesión de la acusada, toda la familia le echó la culpa al candidato. Desde ese día el matrimonio comenzó a desmoronarse.