Las autoridades de Dubái se encuentran de cabeza investigando las causas del misterioso y cuático incendio que afectó la noche de Año Nuevo uno de los hoteles más lujosos de la ciudad, un rascacielos de 63 pisos, que hasta ayer seguía echando humo.
Según los investigadores, el incendio comenzó en el piso 20 del hotel The Address Downtown, a una hora a la que miles de personas, entre ellas numerosos turistas, se habían congregado en ese barrio para celebrar el cambio de año.
Pese a que las llamas provocaron el pánico en los alrededores del rascacielos, no hubo que lamentar ningún herido grave, y sólo se anotaban 16 lesionados, y todo gracias a las pulentas medidas de seguridad que tenía la construcción.
El origen del siniestro aún no ha sido determinado, a la espera de un comunicado de las autoridades.
Un alto responsable de los servicios de seguridad, el general Dahi Khalfan, publicó en Twitter una foto en la que mostraba un pequeño fuego bajo un alféizar en la parte inferior de la torre. “Es ahí donde comienzan las investigaciones”, indicó sin dar más detalles.
El Address Downtown, inaugurado en 2008, es la décimo-octava torre más alta de Dubái.