Al igual que las abuelitas, que nunca botan nada porque siempre los cachureos pueden servir para algo, los pillines de Apple pescaron la tracalá de aifons que la gente desecha por cornetas o porque murieron, por ejemplo, cuando se caen al guáter, y con reciclaje la empresa recuperó nada menos que una tonelada de oro.
En su informe ‘Responsabilidad ambiental’, la marca de la manzana sorprendió con un dato increíble: el 2015 se recobraron 40 palos verdes (unos 2.800 de nuestros melones) en el oro empleado en algunos de sus componentes. Además, ha sacado otros 10 guatones de dólares se recuperaron en cobre, aluminio, plata, níquel, zinc y plomo. ¿Cómo lo halla?
Para que cache que sirve mucho más que para jotear minas por Tinder, su teléfono taquillero también le lleva en su interior cerca de 30 milígramos de oro entre la placa del circuito y otros componentes, eso sin contar que en carcasas otros aparatos tienen piedras preciosas.
En todo caso, si después de leer está nota está pensando en reciclar su iPhone, los expertos advierten que el material es muy complicado de extraer y no lo puede hacer cualquiera, dado que se necesitan máquinas especializadas. ¡Buuu!
