La posibilidad de establecer un alto al fuego "humanitario" durante 48 horas analizaron ayer los más altos cargos de la política israelí, en respuesta a la creciente presión internacional para que se detengan las acciones militares hebreas en la Franja de Gaza.
En todo caso, como indicó el ministro israelí de Bienestar, Isaac Herzog, "si hay una propuesta para una tregua humanitaria, esto no contradice nuestras preparaciones para una operación militar".
Es decir, quedó claro que aunque detenga momentáneamente su ataque sobre Gaza, el gobierno judío al parecer ya tiene absolutamente decidido dar el próximo paso en sus acciones, que consistiría en una ofensiva terrestre.
La propuesta para un alto al fuego de dos días le fue enviada al Primer Ministro hebreo, Ehud Olmert, por el Presidente de Francia, Nicolás Sarkozy.
A esta iniciativa se suma también la decisión de la Unión Europea de pedirle a Israel el cese inmediato de las acciones militares.
También el Presidente gringo, George Bush, puso su granito de arena y se comunicó con las máximas autoridades palestinas para pedirles su ayuda a fin de lograr "un alto al fuego duradero" en Gaza.
AMENAZAS
Hamas, por su parte, no se refirió a la posibilidad de una tregua humanitaria y amenazó a Israel con lanzar misiles a otras ciudades judías.
"A los dirigentes del enemigo les decimos que si continúan con su asalto, nuestros cohetes golpearán más allá de las ciudades hasta ahora alcanzadas", aseguró un vocero del grupo Hamas.
Hasta ayer se contabilizaron al menos 370 muertos en Gaza producto de la ofensiva israelí, mientras que la cifra de heridos se elevó a unos 1.700.
El Estado hebreo, en tanto, informó que desde el sábado han caído más de 200 cohetes explosivos en su territorio.