A los cuarteles de invierno se fue el médico cardiólogo de cuatro pontífices.
Renato Buzzonetti (84), (arriba a la izquierda) a quien Benedicto nombró en el puesto honorario de Médico Pontificio Emérito, fue reemplazado por otro italiano, Patrizio Polisca, un experimentado cirujano cardiovascular y que era su asistente.
Buzzonetti atendió a Juan Pablo II tras el fallido intento de asesinato de 1981 y en su lecho de muerte en 2005 antes de atender al actual Sumo Pontífice, Benedicto XVI. También fue el galeno de cabecera de Paulo VI y Juan Pablo I.
En su libro "Déjenme ir: La fortaleza en la debilidad de Juan Pablo II", Buzzonetti reveló cómo el pontífice polaco supo que sufría de Parkinson.