ROMA 6/2/2010.- Gioacchino Gencgi, capi informático de un lote de fiscalías tanas, juró de abdomen que la agresión del pasado 13 de diciembre al primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, fue más chantete que cahuín de Roberto Dueñas.
"En el lanzamiento de la reproducción del Duomo de Milán a Berlusconi no hay nada de verdadero", verseó el incrédulo Genchi, durante su intervención en el congreso del partido opositor Italia de los Valores.
En sus declaraciones, Genchi aseguró que el supuesto ataque llegó en un momento "providencial" que salvó a Berlusconi de "una dimisión que hubiera sido inminente".
Genchi apoyó su teoría en su experiencia en la policía y a los videos "que muchos jóvenes han colgado en Youtube" para demostrar que en el lanzamiento "no hay nada de auténtico".
