Adolescente de 17 le confesó el crimen a sus padres. Lejos de auxiliarlo, sus progenitores llamaron a la policía.
Impacto generó la muerte de Denise Pazos, una adolescente de 16 años que habría sido asesinada por su pololo, un sujeto de 17.
De acuerdo a los antecedentes, el hecho ocurrió esta semana en la localidad trasandina de Pilar, en Buenos Aires, y habría estado precedido por una serie de actitudes violentas.
Según información policial, el femicidio sucedió en la casa del acusado cuando, según la investigación, tuvieron una pelea y allí el agresor la ahorcó hasta la muerte.
Confesión
“Esto se podía evitar. Una banda de veces dijimos que ese pibe era violento y no hicieron nada y lo poco que hicieron no sirvió de nada”, lamentaron los amigos de Denise, quienes (al igual que la víctima y victimario) asistían Escuela Secundario N° 23.
“Ahora hay una familia destruida y una escuela entera impactada”, agregaron, en diálogo con Pilar a Diario.
Y si bien el imputado le confesó el asesinato a sus padres, luego intentó escapar. “La asfixié, la maté”, habría reconocido.
Lejos de ayudarlo, sus progenitores llamaron a la policía y fue capturado a las pocas cuadras. Por lo pronto, la causa quedó en manos de la Unidad Funcional de Instrucción de Responsabilidad Penal Juvenil.
La pareja
Según detalló La Nación, los adolescentes estaban en pareja desde hace un año. Sin embargo, hace diez días, la relación “había entrado en un impasse”. De hecho, el acusado dejó de ir a clases durante los días previos al ataque y ambos acordaron conversar en la casa de éste. Fue así, como el pasado martes, la menor se dirigió a este inmueble tras salir de la escuela.
Por el momento, en el cuerpo de la víctima no se hallaron signos que se podrían vincular a un ataque sexual, aunque aún se está a la espera del resultado de la necropsia.
La fiscal también analizará una seria de cartas que fueron halladas en el fondo de la casa donde ocurrió el crimen.
“Se encontraron fotos y papeles que se prendieron fuego, pero no se terminaron de quemar. Estaban en un tacho que, con la lluvia, se llenó de agua. Se analizará si en las cartas hay algún indicio de qué pasaba entre los chicos”, sostuvo un detective del caso.