Una ola de opiniones encontradas desató el caso de un presunto ladrón de 17 años al que, según lo declarado por sus castigadores, pillaron intentando robar una bicicleta en una pensión alquilada para realizar tatuajes en Sao Bernardo do Campo, en la región metropolitana de Sao Paulo
Maycon Wesley y su vecino, Ronildo Moreira, ataron al adolescente a una silla de plástico y allí procedieron a tatuarle en la frente la frase: "soy un ladrón y un vacilón" tras advertirle, burlonamente, que le iba a doler.
Los hechos fueron grabados y subidos por los propios tatuadores a Youtube. Sin embargo, el castigo les saldrían bien caro a ambos, pues fueron detenidos y acusados de "tortura". Además, carecerían de pruebas para demostrar que el muchacho efectivamente se encontraba robando.
RECAUDARON FONDOS PARA BORRÁRSELO
El Colectivo Afroguerrilla recaudó más de 5.000 dólares a través de microfinanciación colectiva para borrar el tatuaje en la frente del adolescente.
Según sus familiares, el joven tiene problemas psíquicos y se encuentra en libertad tras negar que estuviera intentando robar.
"Primero vamos a cuidar de él, fue medicado y está asustado con lo que pasó. Muchas personas compartieron su imagen juzgando sin conocer los hechos. Él no hizo nada de lo que fue hecho y publicado en internet", afirmó el abogado de la de la familia.
El dinero cantidad que irá destinada a la operación para quitar el tatuaje, para pagar el tratamiento psicológico del menor y financiar el proceso judicial.