Líder norcoreano reapareció el sábado, después de destacadas ausencias en actos públicos que habían derivado en informaciones sobre un posible mal estado de salud.
El Servicio Nacional de Inteligencia de Corea del Sur ha descartado que el dirigente norcoreano, Kim Jong Un, haya sufrido alguna enfermedad que requiera que fuese operado del corazón, descartando de forma tajante cualquier especulación sobre la salud del líder del país vecino.
Kim reapareció el sábado, después de destacadas ausencias en actos públicos que habían derivado en informaciones sobre un posible mal estado de salud. El Gobierno surcoreano siempre ha defendido que no había indicios de ningún empeoramiento, tesis a la que se ha sumado este martes la Inteligencia.
En una sesión a puerta cerrada ante diputados, representantes de la agencia han confirmado que "Kim no fue sometido a cirugía o a procedimiento médico alguno relacionado con su corazón", según el diputado Kim Byung Kee, miembro del gobernante Partido Democrático.
Lucha contra la pandemia
Los servicios de Inteligencia han apuntado que las apariciones públicas del dirigente norcoreano han caído un 66 por ciento, pero lo atribuyen a un mayor interés por centrarse en cuestiones internas y a las lucha contra la pandemia de coronavirus, informa la agencia surcoreana Yonhap.
Sin embargo, "aunque Kim no apareció en público, seguía gestionando los asuntos de Estado como siempre", sostiene la Inteligencia de Corea del Sur, al apuntar que cualquier operación cardiaca, por mínima que fuese, habría requerido de entre cuatro y cinco semanas de rehabilitación.