"Lo veo como la única manera que tengo para ayudar a Gaza, mostrar lo que ocurre aquí. A veces tuiteo mientras lloro o tengo miedo", así relata Farah Baker, una tierna adolescente de 16 años, su afición a tuitear cómo padece la población palestina en Gaza durante los ataques y bombardeos israelíes.
La joven se ha convertido en una sensación en las redes sociales, especialmente cuando las bombas estallan en su entorno.
Farah toma su teléfono móvil o su computadora portátil antes de agacharse para cubrirse y poder escribir tuits que capturen las aterradoras escenas de caos que la rodean.
Aunque era una poco conocida deportista en el colegio, sus seguidores han pasado de 800 a 187.000.
Vive cerca del hospital Shifa de Gaza, donde su padre es cirujano, lo que le da una experiencia real de ambulancias sonando y explosiones y ataques aéreos israelíes.
Baker a menudo graba estas escenas y envía videos para dar a los seguidores una rápida visión personal de la guerra.
Un tuit del 1 de agosto incluía un enlace a un video de una calle oscura con el sonido de repetidas explosiones. En otro, Baker habla sobre cómo se refugia de un bombardeo en una de las habitaciones de su casa.