Macabro plan recibe merecido castigo: condenan a joven que asesinó a su “doble” para fingir su propia muerte

Sharaban K. (izquierda) y Khadidja O. (derecha). Fotos: The Telegraph.
Sharaban K. (izquierda) y Khadidja O. (derecha). Fotos: The Telegraph.

Pareja de la asesina también deberá pasar largos años tras las rejas por ser el autor material del homicidio.

Impacto mundial generó el caso de la joven de origen germano-iraqí, identificada como Sharaban K. (23), acusada de cometer uno de los crímenes más extraños del último tiempo.

De acuerdo a los antecedentes de la policía, la mujer con residencia en Múnich, Alemania, habría buscado intensamente en redes sociales a otra persona que se le pareciera, para luego juntarse con ella, asesinarla y fingir su propia muerte.

“Se ha confirmado que la acusada había contactado con varias mujeres a través de Instagram”, explicó la fiscal general Veronika Grieser.

“Cabe suponer que la sospechosa quería ocultarse, debido a disputas internas con su familia”, añadió.

¿Quién fue su víctima?

La víctima de este atentado fue la bloguera de belleza de origen argelino Khadidja O, quien tenía un gran parecido físico con Sharaban K., la principal acusada del delito.

Datos revelados por la policía detallaron que la presunta autora del crimen se contactó con ella antes de su muerte, para decirle que tenía unos productos de maquillaje que podían ser de su interés. Interesada en recibirlos, Khadidja O. aceptó la propuesta, lo que abrió paso al día de su asesinato.

Los investigadores dijeron que Sharaban K. y su novio, Shequir K., habrían ido a buscarla en un automóvil, para después llevarla a un bosque en Ingolstadt y apuñalarla más de 50 veces.

Preocupados porque esa noche Sharaban K. no llegó a casa, sus familiares alertaron a la policía alemana y salieron a buscarla por los alrededores. Fue así como encontraron su cuerpo.

Cadena perpetua

La pareja acusada de este violento episodio fue detenida en agosto de 2022, pero recién hace una semana conocieron su condena.

La joven alemana, de ahora 25 años, tendrá que pasar el resto de su vida tras las rejas.

Además, el tribunal condenó a la misma pena a su cómplice y ejecutor del crimen, un joven de origen kosovar de 26 años.

Durante la lectura de la sentencia, el juez Konrad Kiegl estableció que la pena no podrá ser revisada tras cumplir 15 años de prisión y que la condenada y cerebro del asesinato tendrán que esperar al menos 20 años para que la justicia determine si podrá ser liberada o deberá continuar a la sombra.

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