En septiembre de 2007 la empresa de modas Benetton lanzó una agresiva campaña publicitaria, donde mostraban a una jovencita anoréxica de Francia, de 26 años y 31 kilos, posando desnuda. La campaña fue tan chocante, que en varios países fue prohibida debido a las crudas imágenes.
Lo años pasaron y la modelo Isabelle Caro, quien ilustró la campaña, siguió batallando contra la enfermedad. El 17 de noviembre pasado perdió la vida, pero su familia informó la muerte recién ayer, informó la agencia AP.
Durante su convalecencia, Caro escribía en su blog cada uno de sus sentimientos y su abrumadora dieta, que consistía generalmente en un chocolatín, dos pedazos de pastel y un poco de líquido al día. Su dramática experiencia fue plasmada en el libro: "La pequeña niña que no quería ser gorda".
"Uno es obligado a engordar. Y apenas uno recibe el alta, pierde todo el peso de nuevo. Al menos eso es lo que me pasa", relata la joven en su libro y su página web.
Según varias agencias internacionales, la muerte de Caro habría ocurrido en Tokio, presuntamente por una neumonía arrastrada por dos semanas.
Caro tuvo anorexia desde los 12 años. Varias veces pasó hambre hasta estar cerca de la muerte y era hospitalizada.
