El impactante video de la mujer con su tío fallecido se volvió viral en las redes sociales. Tras pasar unas semanas detenida, fue liberada y contó su versión de la insólita situación.
Hace unas semanas se viralizó un video de una mujer que llevó el cadáver de su tío a un banco e intentó acceder un millonario préstamo en nombre del difunto en Río de Janeiro, en Brasil.
La mujer, identificada como Érika de Souza Vieira Nunes, de 43 años, llegó al recinto bancario junto a su tío fallecido, Paulo Roberto Braga, quien estaba en una silla de ruedas.
La insólita situación alertó al personal bancario, quienes grabaron a la mujer que intentaba ayudar al cadáver a firmar un documento y llamaron a las autoridades. Érika fue en aquel entonces detenida y se encuentra a la espera de un juicio en su contra, consignó el medio El Heraldo.
Recientemente, la mujer fue liberada bajo fianza y contó su verdad sobre lo ocurrido en una entrevista con el programa “Fantástico” del canal Globo.
“No me di cuenta de que mi tío estaba muerto. Es absurdo lo que dice la gente. No soy esa persona de la que habla la gente, no soy ese monstruo”, expresó Érika en el espacio.
“Ni yo, ni otras personas nos dimos cuenta. ¿Cómo se le da un papel a un muerto para que lo firme?”, insistió Vieira, según consignó Infobae.
Con respecto a la relación con su tío, la mujer aseguró que era “increíble”. “Él era independiente, caminaba, hacía lo que quería, tenía buena mente. No estaba en silla de ruedas y yo no era su cuidadora”, explicó.
Érika aseguró que al momento de llegar al banco para retirar el dinero, el hombre aún se encontraba consciente. “Le pregunté si sería mejor sujetarle (la cabeza). Dijo que sí”, afirmó.
Por otro lado, la mujer apuntó al medicamento que había tomado ese día. “Mientras estoy en tratamiento estaba tomando una pastilla para dormir llamada Zolpidem y tomé más de lo que debía”, reveló Érika.
La mujer fue liberada hace unos días luego de que la defensa de Vieira aludiera a los “problemas mentales” de ella y se sumara el hecho de que la imputada estaba a cargo de una niña que sufría de discapacidad.