Nahir Galarza, la joven argentina que reconoció haber asesinado a tiros a su pareja, Fernando Pastorizzo, fue condenada este martes a cadena perpetua. La resolución de los jueces se llevó a cabo de forma unánime.
La acusada de 19 años deberá estar 25 años tras las rejas y recién a los 35 años de condena podría solicitar la libertad condicional. Galarza no estuvo presente al momento de ser leída su sentencia.
Además, durante el fallo descartaron que ella hubiera disparado de forma involuntaria o recibido violencia de género. Por lo que fue acusada de "homicidio calificado".
Por otro lado, la Justicia también consideró que Galarza y Pastorizzo mantenían una relación de pareja y no ocasional, como planteó la defensa de la acusada. Hecho que agravó su condena.
A sangre fría
El crimen de Fernando Pastorizzo, de 20 años, ocurrió el 29 de diciembre de 2017. Horas después de dar su versión de los hechos, Galarza confesó haber sido la autora de los disparos.
La joven había dicho que los disparos fueron cometidos con el arma reglamentaria de su padre, que es efectivo de la Policía de la provincia de Entre Ríos.
Sin embargo, en una segunda declaración dijo que había sido su novio el que había tomado el arma y que los disparos los había hecho en forma accidental.
Carla Pastorizzo, hermana de la víctima, agradeció a los jueces y espera que "esto le sirva para que reflexione sobre lo que hizo", añadiendo que "la familia de ella nunca nos pidió disculpas".
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