Thomas Vieira Gomes, alias 2N, es un reconocido narco brasileño. Por ser uno de los criminales más peligrosos de Río de Janeiro. Su rostro aparece en los carteles de los más buscados por la policía de su país.
Sin embargo, 2N demostró que hasta el narco más criminal tiene su corazoncito. Esto, porque realizó una acción que le significó coronarse como héroe dentro y fuera de una favela.
Hace unas semanas, encabezó el secuestro de dos enfermeros. Con el propósito de que vacunaran a los habitantes de la favela Salgueiro, una de las más pobres de Río, contra la fiebre amarilla.
Hay que recordar que en los últimos meses, Brasil lucha contra una epidemia de fiebre amarilla, que ya lleva decenas de muertos. Incluso un chileno fue víctima fatal de la enfermedad.
El "Robin Hood" narco
Por esta razón, el 27 de enero el gobierno realizó una campaña de vacunación contra la fiebre amarilla para todo Río. Sin embargo, la favela Salgueiro fue marginada de esta ayuda, relataron medios locales.
Vieira junto a sus hombres fue al centro de salud municipal e "invitó" a dos enfermeros a acompañarlo. Y que llevaran la mayor cantidad de jeringas y vacunas como fuera posible.
La improvisada comitiva se dirigió a un bar de Salgueiro. Donde los profesionales de la salud pasaron toda la noche vacunando a la gente de la favela.
Cuando terminaron su pega, los llevaron de vuelta al centro de salud. De acuerdo al testimonio de los enfermeros, en todo momento fueron tratados con amabilidad.
La noticia se hizo conocida cuando el ex Ministro de Medio Ambiente Carlos Minc alabara la acción del narco en Twitter.
"Puede que sea un rufián, pero ha brindado un servicio público a la comunidad", escribió.
Minc defendió que 2N tenía que ser detenido y juzgado por la acción, pero la verdadera responsabilidad recaía en "un sistema de salud público en quiebra por la corrupción y la falta de planificación".