Un asteroide del tamaño de un autobús escolar pasó este jueves sumamente cerca de la Tierra, lo que dio a los científicos la oportunidad de poner a prueba los sistemas de alerta que se activarían en caso de una inminente colisión con un objeto del espacio.
El asteroide 2012 TC4 se acercó a unos 44.000 kilómetros de la Tierra, una distancia minúscula para las mediciones espaciales.
Nunca hubo riesgo de un impacto, aunque el asteroide llegó a ingresar a la órbita de la Luna y de algunos satélites artificiales.
"Básicamente, pretendimos que este era un objeto 'crítico' con un elevado riesgo de impactar la Tierra. Pusimos a prueba nuestros canales de comunicación, nuestros telescopios y sistemas de radares para realizar observaciones", dijo Detlef Koschny de la Agencia Espacial Europea (ESA) en un artículo publicado en el blog oficial del organismo.
RESULTADOS DISPARES
Koschny dijo que un importante sistema de radares en Puerto Rico no operó debidamente por los daños causados por el huracán María y tuvo que ser reemplazado por otra plataforma instalada en Estados Unidos.
"Esta es exactamente la razón por la que hacemos este ejercicio, para que las cosas no nos tomen por sorpresa", declaró.
Imágenes de radar mostraron que el asteroide tenía entre 10 y 12 metros de ancho, casi el tamaño del cuerpo que estalló en el 2013 sobre la ciudad rusa de Chelyabinsk y que dejó heridas a más de 1.000 personas producto de vidrios rotos y otros escombros.
Koschny dijo que la ESA ahora tendrá que actualizar sus predicciones sobre cuánto se acercará el asteroide 2012 TC4 a la Tierra en su próximo paso, que está previsto para el 2079.