Hay adicciones al manyete para todos los gustos entre las amas de casa británicas, pero la de la morocha Adele Edwards es única en su especie: La señora de 30 abriles es seca para comerse el relleno de los sillones.
Según comenta a la prensa british, como The Sun y Daily Mirror, la mami de cinco peques siente una fascinación desde que era pitufa por almorzarse la espuma de sillones, cojines y respaldos, incluidos elásticos y partes de goma.
Si bien su adicción la está matando, ella reconoce que no puede evitarlo.
Es más, desde que se inició en esta afición ya lleva 16 sofás engullidos.
"Tenía 10 años, cuando estaba jugando con un primo y comencé e pelar un sillón y rompí el relleno y comencé a masticarlo como si fuera chicle. Después comenzó a gustarme la textura y comencé a tragarlo como si fuera dulce", confesó al Daily Mirror la atribulada Adele, quien hace unos meses fue internada de urgencia por una obstrucción intestinal.
Los médicos que la tratan explican que su mal es conocido como el "síndrome de la urraca", una manía que afecta marginalmente a pequeñines y a mujeres embarazadas que manyan cosas raras.
La pobre Adele está bajo tratamiento severo, porque peligra su vida.
