Niña iraquí no quiso ser bomba humana

La nueva táctica de Al Qaeda en Irak de emplear a mujeres adultas y niñas para efectuar atentados con bombas tuvo el domingo un severo revés, luego de que una muchacha de 13 años se arrepintiera de inmolarse y le pidiera ayuda a la policía para quitarse el chaleco con explosivos que portaba.

El hecho, que aparece como una luz de esperanza en medio de la creciente violencia, se produjo en la ciudad de Baquba, considerada el principal bastión de Al Qaeda en el país.

"Los reportes dicen que la niña se acercó a la policía iraquí diciendo que tenía puesto un chaleco con explosivos, pero que no quería hacerse estallar", contó ayer a la prensa el vocero del Ejército gringo en Irak, David Russell.

El mismo militar precisó que ahora las autoridades están intentando determinar si la cabra fue obligada a ponerse el chaleco explosivo o si lo hizo por voluntad propia.

FENÓMENO CRECIENTE

Los ataques suicidas con bombas por parte de mujeres se han vuelto cada vez más comunes en la lucha que están dando los elementos fundamentalistas en contra de la presencia del Ejército gringo en Irak.

Según los analistas yanquis, esto se debe a que los estrategas sunitas consideran que las féminas tienen mayores posibilidades de cometer un atentado con éxito, pues en general los policías iraquíes, por un tema de religión, son reticentes a registrarlas.

De hecho, en las últimas semanas dos mujeres cometieron sendos atentados suicidas en contra de peregrinos chiítas, causando la muerte de decenas de personas.

Por ello, "la entrega de la joven suicida con bombas indica que la población iraquí continúa rechazando la violencia de Al Qaeda y sus prácticas", según manifestó  el portavoz militar gringo para el norte de Irak, Jon Pendell.

ACUERDO

En otro ámbito, ayer se informó  en Bagdad que el gobierno iraquí llegó a un acuerdo con Estados Unidos, según el cual esta última nación y sus aliados dejarán definitivamente el país a finales de 2011.

COMPARTIR NOTA