El domingo pasado, Michelito, el niño torero de 12 años, sufrió más de la cuenta en una corrida de toros en Colombia.
El pequeño cuate, recibió varios golpes y revolcones al ser cogido durante su participación en la plaza de Cañaveralejo de Cali. En ambas, su padre salió corriendo en su ayuda y también recibió lo suyo.
El menor, se retiró golpeado y llorando por su actuación; pero igual ya está pensando en volver al ruedo.
En todo caso no es la primera vez que le pasa esto a Michelito, ya que en noviembre pasado, en Lima, también salió del ruedo con contusiones y llorando.
Su madre, Diana Peniche, señaló que "Le tocó una mala tarde".
La mujer le achacó la malacue al viento: "una ráfaga de aire que le descubrió la muleta y le dio la voltereta", dijo.