A paso firme avanza Barak Obama hacia la candidatura del Partido Demócrata para las elecciones en Gringolandia, luego de que el miércoles arrasara "como un huracán" con Hillary Clinton en las primarias realizadas en Virginia, Maryland y el cototo Distrito de Columbia, donde se sitúa nada menos que Washington, la capital.
El senador negro, que se impuso con enormes diferencias sobre la ex primera dama, aseguró tras su victoria que "este movimiento no parará hasta que consigamos el cambio".
La derrota provocó otra crisis en el equipo de Hillary.