Las Naciones Unidas reconocieron ayer al Estado palestino como no miembro con estatus de observador en una votación en la Asamblea General que recibió el apoyo de 138 países y el rechazo de 9, mientras 41 se abstuvieron.
El resultado es considerado un gran éxito para los palestinos, que necesitaban una mayoría simple de 97 votos a favor para aprobar su solicitud en la Asamblea de 193 miembros.
El reconocimiento es válido sólo dentro de la organización de la ONU, pero ningún miembro está obligado ahora a reconocer al Estado palestino, sino que queda a criterio de cada gobierno.
Como Estado observador, estatus que comparte con el Vaticano, los palestinos pueden trabajar en comisiones y tienen derecho a voz, aunque no son miembros del organismo ni tienen derecho a voto. Tampoco pueden hacer uso del voto en la Asamblea General.
De todas formas, pueden presentarse como demandantes en cortes penales internacionales y poner en el orden del día los asentamientos israelíes en territorios ocupados.
Previamente, el presidente palestino, Mahmud Abbas, pidió este jueves a la Asamblea General que emita al pueblo palestino un “certificado de nacimiento para la realidad del Estado de Palestina”.
“Vuestro apoyo a nuestro esfuerzo hoy le dará una razón para tener esperanza a un pueblo asediado por una ocupación racista y colonialista”, añadió.