En privado y muy lejos de los medios de comunicación pasaron los padres de Madeleine McCann, Kate y Gerry, el primer aniversario de la desaparición de su pequeña hija.
Miles de británicos fueron a misa con una vela en memoria de Maddie, y los angustiados padres pidieron que las prendieran para "iluminar el camino a casa" de su hija.
En Portugal, en tanto, también miles de personas acudieron a las iglesias para pedir por la pequeña, que remeció a todo el país tras desaparecer el 3 de mayo desde la habitación del hotel en la que estaba con sus hermanos en el balneario Praia da Luz.
En la víspera los McCann ofrecieron una entrevista al diario Público, en la cual Kate dijo tener la certeza absoluta de su Maddie fue sacada por alguien de la habitación. "Conozco a mi hija y hay ciertos pormenores en el departamento que indican claramente que ella fue raptada", enfatizó la mujer.
Garry, por su parte, se mostró molesto cuando se le consultó por el diario de vida de su mujer y la supuesta importancia que tendría para la investigación. También desmintió que hayan sido ellos los que se contactaron inicialmente con la prensa british para revelar el caso, aunque admitió que sí lo hizo un cercano, al que no identificó.
