Luego del matrimonio del príncipe William, todos están ansiosos por celebrar la boda del hijo de Lady Di, Harry.
El príncipe Enrique (o Harry), está como loco buscando polola para poder formalizar una relación seria. Lamentablemente, afirma que a veces le gustaría ser uno más del perraje para poder encontrar más facilmente al amor de su vida, puesto que pertenecer a la realeza espanta a las chiquillas.
Ya a sus 27 años de edad, declaró a la cadena gringa de noticias, CBS News, que le ha costado mucho encontrar pareja.
Los periodistas le preguntaron si acaso ser miembro de la realeza era igual que vivir en un cuento de hadas, a lo que Harry contestó que no, "para nada. Como cualquier chica te lo dirá".
"Es algo así como: 'Oh, Dios mío, es un príncipe'. Pero no. La tarea que ello conlleva es mucho más dura, y si no, mírame a mí, tengo 27 años y aunque no busco a alguien que cubra ese rol (de novia), sería bueno encontrar a alguien que se anime", declaró Harry.
El pololeo que más le duró al príncipe fue con la sudafricana Chelsy Davy, de 26 años. Tras 5 años de pololeo, la lolita lo pateó, dejándole claro que no quería convertirse en miembro de la familia real británica.