Un paso en falso podría provocar una explosión fatal. Esto es lo que dicen los científicos sobre este cráter que está ardiendo desde hace décadas.
Su aspecto lo ha hecho merecedor de su nombre: la Puerta del Infierno. Se trata de un cráter llameante que está ubicado en el misterioso desierto de Karakum, en Turkmenistán, Asia Central, y que lleva décadas ardiendo sin parar.
Los científicos todavía no logran encontrar respuestas ante los secretos de este cráter, también conocido como Darvaza. Se cree que hace varios años, los ingenieros soviéticos perforaron el suelo en busca de gas natural, provocando un gran colapso.
El gran problema es que emite constantemente un gas de efecto invernadero, llamado metano, que preocupa al mundo de la ciencia.
Qué es la Puerta del Infierno, el cráter en Turkmenistán
Cuando lo ves, pareciera ser la entrada al inframundo. De ahí su nombre, y también su popularidad. Son millones las personas que viajan a Turkmenistán a ver la Puerta del Infierno en vivo y en directo.
Pero, ¿es peligroso estar cerca? ¿Qué riesgos conlleva este cráter?
Según Infobae, la Puerta del Infierno emite metano, un gas de efecto invernadero que podría potencialmente aumentar el calentamiento global. No obstante, la combustión del gas (ya que está permanentemente encendido con llamas) hace que la mayor parte del metano se convierta en dióxido de carbono y vapor de agua, por lo que el efecto se vería disminuido.
Es por esto que se despertó un gran debate cuando alguien propuso extinguir las llamas. Y es que sin el fuego, la emanación de gas podría ser realmente peligrosa. Es por esto que todavía no se ha intentado apagarlo.
Según Guillermo Rein, científico del fuego en el Imperial College de Londres, intentar extinguir las llamas de la Puerta del Infierno puede resultar en una explosión que “puede salir mal”.
En esta línea, la única forma de “cerrar” la Puerta del Infierno sería localizar la fisura subterránea que emite el gas y sellarla con concreto. Pero no solo es un trabajo complicado, sino que también es peligroso. Cualquier chispa indebida o una perforación mal hecha podría también desencadenar una explosión fatal.