BENGASI (LIBIA)(Agencias).- Al menos ocho mil personas han perdido la vida desde que se iniciaron los combates entre los rebeldes y las fuerzas que respaldan Muamma Gaddafi, informó hoy el Consejo Nacional instituido por la opisicón libia.
En tanto, la coalición internacional atacó hoy zonas de Ajdabiya, al este del país, donde se escucharon al menos cinco explosiones, tres de las cuales fueron atribuidas por grupos rebeldes a operaciones militares de la coalición internacional.
El portavoz del Consejo Nacional, Abdel Hafiz al Ghogha, fue quien entregó la cifra de muertos, pero advirtió que "el balance puede ser mucho más grave, porque no tenemos noticias de algunas partes del país".
ESPACIO AEREO BAJO CONTROL
El gobierno británico reportó en un informe que aviones de combate Tornado atacaron tanques libios que presuntamente "amenazaban" a civiles en Ajdabiya, sin precisar si a raíz de lo anterior se produjeron víctimas.
En tanto, el jefe del Estado Mayor de París, almirante Edouard Guillaud, en declaraciones a una radio que un avión francés destruyó una batería antiaérea y que el espacio aéreo "está bajo control" de las fuerzas de la coalición.
Explicó que los ataques están restringidos para evitar "el riesgo de herir o matar civiles inocentes", pero admitió que "nadie puede hacer promesas absolutas".
AGRADECEN INTERVENCIÓN
Mientras, Centenares de personas expresaron hoy en la plaza de los juzgados de Bengasi, capital rebelde de Libia y epicentro de la rebelión, su agradecimiento a la coalición internacional por imponer una zona de exclusión aérea sobre el país.
Los manifestantes, en su totalidad hombres, acudieron a la plaza pertrechados con banderas tricolor -rojo, negro y verde- de la época monárquica y con enseñas de Francia, de la Unión Europea y de Egipto, entre otras.
El profesor de gimnasia Fares al Sahen, de 27 años, que acudió a la protesta acompañado de su sobrino Nadi de 10 años, que llevaba una enorme bandera tricolor, señaló que lo hizo para dar las gracias a los presidentes de EE.UU., Barack Obama, y de Francia, Nicolas Sarkozy, y al primer ministro británico, David Cameron, por su iniciativa a la hora de decidir la imposición de una zona de exclusión aérea.
"Estamos muy contentos por la intervención aérea internacional, pero deben continuar los bombardeos contra las fuerzas de Gaddafi en Misrata y Zintan", agregó.
Los manifestantes, algunos de los cuales llevaban kufiya (pañuelo palestino) en la cabeza, cantaron lemas como "Libia libre, Gadafi fuera", "la sangre de los mártires no va a ser en vano" y "levanta la cabeza, Libia libre", bajo el sol que hoy lucía en Bengasi.