Una luz de esperanza para los machos recios se prendió en Estados Unidos, lugar donde se realizó el primer trasplante de pene en la historia de ese país.
El beneficiado fue Thomas Manning, de 64 pepas, quien padeció un cáncer en su regalón, por lo que el miembro debió ser amputado... ¡Qué penca!
"Quería volver a ser el hombre que había sido", dijo. "No podía tener una relación con nadie. No puedes decirle a una mujer 'tuve una amputación de pene'", fueron sus sentidas palabras.
Los doctores Dicken Ko y Curtis L. Cetrulo, quienes hicieron la peluda operación en el Hospital General de Massachusetts, se tienen toda la fe del mundo y esperan que Thomas tire p'arriba con la recuperación.
Los médicos estiman que en un par de semanas podrá orinar de pie, y en unos meses más, estrenar su nuevo amigo en el ring de cuatro perillas.