Taita dicharachero despide a su hija vestido de... ¡lo que sea!

Hay papurris ociosos, buenos pa'l leseo y Dale Price, el gringo cojo que se disfraza todos los días de cualquier web para decirle chaíto a su hija cuando toma el bus escolar.

El guatón simpático no tiene pega, pero es más cariñoso que un osito con sus tres hijos. Por eso, cuando la micro del condado de Alpine pasó por primera vez por la puerta de su casa, él y su esposa idearon una talla para su pitufa del medio, Rain.

Desde ese 25 de agosto del año pasado, el papurri se ha disfrazado casi 170 veces, sagradamente todas las mañanas.

De gitano, pirata, Jedi, novia con ramo en mano, "Dominó" Jackson, pollo, Batman, payaso, mexicanote,  agente del servicio secreto, Princesa Leia, Harry Potter, Ninja,  rockero de Kiss y ¡hasta de La Sirenita! se vistió el orondo seco pa' la talla.

A la que no le hace ni una gracia es a la adolescente Rain, que tiene que aguantar los palanqueos de los demás brocacochis. En los primeros días no la hacía reír ni Cantinflas. "Fue muy vergonzoso al principio, pero ahora me parece más divertido", dijo la lolita al Daily Herald.

El gordito cesante aclaró que no ha gastado más de 25 lucas en plata chilena, porque arma los disfraces con la ropa que le regalan sus vecinos.

Y para los amargados que atacan a su marido, la reina de la casa Price gritó: "Por el amor de Dios, sentido del humor. Menos mal que no somos candidatos a cargos de ningún tipo, aunque Dale debería ser el "Rey del Mundo".

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