Según aclaró el fiscal de la zona, la honesta historia que dio vuelta al mundo no fue más que una mentira.
En la ciudad de Nogoyá, Argentina, el panadero José Sánchez se hacía famoso hace un par de días por una historia digna de admirar en estos tiempos.
El hombre, de 39 años, aseguró haber encontrado medio millón de dólares y un revólver dentro de un maletín, el cual había sido olvidado por un empresario que manejaba por el sector. Según José, el comerciante conducía por la calle local, cuando, por razones desconocidas, bajó de su camioneta y volvió a subir mientras hablaba por teléfono, olvidando en la maniobra su maletín.
José lo siguió hasta que lo encentró, le devolvió el dinero y el empresario, por la generosidad, le ofreció dinero, una casa y empleo, a lo que José sólo aceptó el trabajo, sacando aplausos no sólo en Argentina, sino que en todo el mundo.
Tanta humildad duró nada. La noche de esta martes, el diario Clarín informó que el fiscal de Nogoyá, Federico Uriburu, dijo que todo era mentira: "Siendo las 20 horas del martes, estoy en condiciones de decir que todo es mentira (...) No hay empresario, ni camioneta, ni maletín, ni dólares ni revólver. Nadie vio nada".
Las autoridades también indicaron que hay cuatro cámaras de seguridad sobre el lugar donde, supuestamente, se encontró el maletín y en estas no se ve registro de tal suceso.
El periódico trasandino Clarín, publicó que José había sido interrogado por la División Investigaciones de Nogoyá y que, según el fiscal, "lo que contestó es poco creíble, con detalles confusos, como cuando describió al presunto dueño de la plata, lo que no quedó muy claro".
"Quedé como el mentiroso más grande del mundo", dijo Sánchez después de que su historia quedara al descubierto y tuviera que confesar la verdad ante el fiscal.
"Vengo a dar la cara. Todo lo que yo hice lo hice por necesidad. Hace poco vi que un hombre había encontrado dinero y ahí la gente te escucha, te presta atención", dijo.