Por primera vez desde el 2002, cuando la base naval yanqui de Guantánamo se abrió como prisión para presuntos terroristas, uno de los detenidos fue trasladado a Nueva York para ser juzgado, pero por un tribunal civil.
Es, según los mirones internacionales, una señal de que lo prometido por Obama, en torno a desmantelar la prisión de Guantánamo, se cumplirá.
Originiario de Tanzania, Ahmed Khalfan Ghailani, de 35 peras, tiene 286 cargos en su contra, y está acusado de participar en atentados en Tanzania y Kenia, que dejaron 224 muertos.