Mandatario pretende detener dos caravanas de inmigrantes que provienen de Centroamérica. Se estima que son siete mil los caminantes.
Arde la frontera entre Estados Unidos y México, pues el Gobierno de Donald Trump anunció este lunes que desplegará más de 5.200 soldados en su frontera con México para enfrentar a dos caravanas de migrantes centroamericanos que esta semana cruzan Guatemala y el mismo país azteca con destino al país del norte.
El comandante del Mando Norte del Departamento de Defensa de EE.UU., Terrence J O'Shaughnessy, reveló que 800 militares ya van camino a la frontera suroeste. Agregó que a finales de esta semana el número de soldados que custodian la zona superará los 5.000.
La caravana
El mar de migrantes en su mayoría son hondureños y han protagonizado duras experiencias en su peregrinar. El grupo, que esta conformado por hombres, mujeres y nioños de todas las edades, cruzaron a pie el río Suchiate, que separa a Guatemala de México.
Los observadores de la travesía informaron que algunas de estas personas cruzaron el río con el agua hasta el cuello, mientras la policía mexicana esperaba de pie en la orilla.
Las escenas observadas fueron estremecedoras, pues para hacer frente a la corriente del río los migrantes se agarraron de la mano y formaron una cadena humana, mientras un helicóptero de las Fuerzas Federales de México sobrevolaba el área, en algunos momentos a baja altura, lo que provocó fuertes ráfagas de viento que desestabilizaron a las personas.
Pero esta no es el primer grupo de personas que trata de llegar a Estados Unidos. El 13 de octubre pasado 4000 personas salieron de San Pedro Sula (Honduras) con el mismo destino.
Ellos intentaron cruzar a México por el puente fronterizo Rodolfo Robles, pero la policía mexicana impidió a sus integrantes pasar mediante la utilización de gases lacrimógenos. Los migrantes respondieron con piedras y palos, lo que provocó un enfrentamiento de varias horas que se saldó con un muerto y algunos heridos.
En el trayecto de estas caravanas los pobladores de la zona salen al paso de los caminantes para entregarles agua y comida.