Al nivel de la final de un Mundial de Fútbol o de la clausura de unos Juegos Olímpicos fue el número de televidentes que vieron en vivo y en directo el rescate de los mineros desde el yacimiento San José.
Es que según los cálculos de los expertos, cerca de mil millones de personas en todo el orbe no despegaron sus ojales de la cajita idiota y, con la misma emoción que los chilenos, vieron cómo uno a uno eran sacados desde el socavón los hombrones que pasaron 69 días a 700 metros de profundidad.
A esta cifra, ya de por sí gigantesca, habría que sumar a los innumerables internautas que siguieron el notición a través de las distintas páginas web y redes sociales.
Para poner en contexto el asunto, cabe recordar que en 1969, cuando el hombre pisó la Luna, "sólo" 600 millones de terrícolas vieron por la tele el histórico momento.
Y aunque hoy es mucho mayor la población y el número de televisores, porcentualmente ambos eventos están casi a la par.
Autoridades, figuras públicas y deportistas, así como personas comunes y silvestres hicieron un alto en sus vidas para ver el "milagro" de la mina San José.
Y los "nerds" del ratón y el teclado no lo hicieron mal tampoco, porque la historia de los 33 mineros que supieron ganarle a la muerte cautivó el corazón de todos.
Por lo mismo, no extraña que surgieran diversos grupos en Facebook para homenajear a los titanes.
PELOTEROS QUEDARON FELICES Y MANDARON ENE SALUDOS
Peloteros en activo y otros que ya colgaron los "chuteadores" también se sumaron a las felicitaciones por el exitoso rescate.
En Italia, Alexis Sánchez y Mauricio Isla juraron que "estamos felices por nuestro país y porque los mineros podrán abrazar finalmente a sus familias".
Mientras, al otro lado de la cordillera, el actual DT de Boca, Claudio "Bichi" Borghi, dijo que "me gustaría tomar un café con alguno de los mineros, porque han vivido una experiencia increíble".
Para el goleador histórico de la Roja, Marcelo Salas, "estos mineros son un ejemplo para todos los chilenos y para todo el mundo".
COMPARAN LA CÁPSULA FÉNIX 2 CON EL APOLO 13
En 1970 el Apolo 13 se dirigía a la Luna cuando una falla lo dejó inutilizable y los tres astronautas tuvieron que usar la cápsula lunar para retornar a la Tierra.
Y aunque los mineros no han abandonado nunca el planeta, para dejar las entrañas de la tierra también debieron emplear una cápsula diminuta, verdadera joyita diseñada por ingenieros criollos.
De un peso cercano a los 400 kilos, el Fénix 2 tiene un ancho de 53 centímetros, justito para que quepa un hombre de estatura media.
En su interior dispone de tubos de oxígeno y equipo de audio y video.
Además, cuenta con un sistema de monitoreo permanente de sus signos vitales.
LA COBERTURA DE LOS MEDIOS SIGUE EN VIVO
Lejos de disminuir el interés por la suerte de los mineros después de los primeros rescates, la noticia continúa acaparando los espacios informativos en televisión y la web.
Es que no por nada en el norte de Chilito hay instaladas 150 antenas satelitales, mientras que para la final del Mundial de Sudáfrica hubo sólo 50.
NASA DESTACA DETERMINACIÓN DE LOS CHILENOS
Un reconocimiento a la "firme determinación" de los chilenos realizó el director de la NASA, Charles Bolden, quien también piropeó a los expertos de la agencia que trabajan en Chile.
"Estoy orgulloso de quienes lograron trasladar la experiencia de las naves espaciales a la Tierra cuando más se necesitaba", manifestó el hombrón.
MANDATARIOS DE TODO EL ORBE SE ALEGRARON POR LOS TITANES CHILENOS
Líderes de todo el mundo mandaron a Chilito felicitaciones por el desenlace del rescate.
El presi gringo, Barack Obama, dijo que "nuestros pensamientos y oraciones están con los valientes mineros".
El Papa Benedicto XVI también saludó a "los mineros de la Región de Atacama, en Chile".
En Perú, Alan García sostuvo que "este milagro es como la presencia del mensaje de Cristo, que dice ábrase la tierra y salgan los mineros".
En España, el rey Juan Carlos recordó el terremoto del 27-F y destacó que "el pesar por aquella catástrofe contrasta con la alegría" del rescate.
En Brasil, Lula da Silva habló de un "extraordinario trabajo".