También plantean la idea de enviar mujeres con un rango de "ministerio oficial" a zonas donde la presencia de la iglesia es escasa.
Un documento del Vaticano dijo el lunes que la Iglesia debería considerar la idea de enviar sacerdotes casados en áreas remotas de la Amazonía. Un giro histórico que podría allanar el camino para su uso en otras zonas donde el clero es escaso.
La recomendación, incluida en un documento de trabajo preparado por el Vaticano para un sínodo de obispos de la Amazonía programado para octubre, pide también algún tipo de "ministerio oficial" para las mujeres de la zona, aunque no ofrecía más detalles.
Fue la mención más directa en un documento del Vaticano acerca de la posibilidad de un sacerdocio de casados, aunque limitado, y de un mayor papel pastoral para las mujeres en una zona del mundo.
El documento se refirió a la posibilidad de ordenar lo que se conoce como "viri probati" -hombres de carácter probado en latín- para hacer frente a la escasez de sacerdotes.
Estos hombres serían ancianos, miembros destacados de la comunidad católica local y con familias adultas.
"Al tiempo que se afirma que el celibato es un don para la Iglesia, ha habido peticiones de que, para las zonas más remotas de la región, (la Iglesia) estudie la posibilidad de conferir la ordenación sacerdotal a los ancianos, preferentemente indígenas, miembros respetados y aceptados de sus comunidades", dice el documento.
Papa también considera la opción
Según indicó, tales hombres podrían ser ordenados "aunque tengan ya una familia establecida y estable, para garantizar los sacramentos que acompañan y sostienen la vida cristiana".
Sólo los sacerdotes pueden decir misa u oír confesiones, lo que significa que los católicos de las comunidades aisladas de la Amazonía pueden pasar muchos meses sin participar en ninguno de los dos sacramentos.
Algunos eruditos católicos han dicho que la aprobación del 'viri probati' en la Amazonía podría eventualmente allanar el camino para su uso en otras partes del mundo como respuesta a la escasez de sacerdotes.
En una entrevista con un periódico alemán en 2017, el Papa Francisco dijo que estaba dispuesto a considerar la ordenación de "viri probati" como sacerdotes en comunidades aisladas.
No obstante, descartó abrir el sacerdocio de forma generalizada a todos los hombres casados o diluir el compromiso de la Iglesia Católica con el celibato, considerado como una virtud que libera a los sacerdotes para que dediquen sus vidas plenamente al servicio de Dios.