Lo que era un momento más de pasión extrema para el deportista extremo estadounidense Ian Flanders terminó en tragedia.
Es que al gringo de 37 años se le enredó en las piernas el paracaídas cuando se lanzó del Cañón Karanlk de Erzincan, en Turquía, por lo que impactó contra las rocas del lecho del río Kara Su y murió de inmediato.
Ian Flanders iba por primera vez al país euroasiético y estaba feiz porque era el centro de atención de un salto en traje de alas, modalidad que debutaba en tierras turcas.
Se lanzó desde una altura de 2.500 metros y cuando caía a 200 kilómetros por hora accionó el paracaídas, que no funicionó correctamente.