El sacrificio, la abnegación y la pachorra que día a día ponen los apóstoles de la prensa, en especial los de La Cuarta, para abastecer a la barra de notitas fresquitas, muchas veces puede acarrear riesgos, y más aún cuando se trabaja en vivo.
Sino pregúntele al apóstol de la KTVU gringa, Alex Savidge, que en pleno despacho mañanero desde San Francisco, California, casi muere arrollado por un tocomocho fuera de control.
Afortunadamente, el apóstol contaba con reflejos felinos y apenas escuchó el tortazo entre ambos móviles se pegó la cachá y arrancó hacia un lugar seguro. Segundos después, volvió a ponerse le micrófono pa' decirle a la barra "todo va a estar bien". ¡Grande!